Durante este mes de abril se han ido dando una serie de acontecimientos durante este período de recogida de firmas con el fin de poder presentarse como plataformas ciudadanas locales y comarcales a las próximas elecciones municipales y a Juntas Generales, sin partidos políticos al uso, es decir, presentando una alternativa para utilizar el sistema sin entrar en el juego de la partitocracia.
El detonante de los acontecimientos es el escrito, publicado en fecha 31 de marzo de 2023, en donde establecía una línea roja con respecto al Sr. Patxi Alaña, por querer, con su actuación, contaminar la propuesta Burujabetza – Democracia Directa con la presentación de su partido político Stop.
Como el Sr. Patxi Alaña estaba en el Grupo de Dirección de Bizitza, es por lo que yo cito a esta Plataforma con estas palabras textuales,“Y en ánimo de esa coherencia quiero trasmitir que, mientras en la cúpula de Bizitza estén ciertas personas, dejo de colaborar con esta agrupación, y, lo que ello conlleva, a pesar de sentirlo profundamente por personas que están en Bizitza y que me merecen el respeto más absoluto”. ¿Dónde, con estas palabras, ve Bizitza, que yo critique a la Plataforma?. Todavía estoy esperando una respuesta.
A pesar de que en mi escrito iba dirigido al Sr. Patxi Alaña, Bizitza, en lugar de adoptar una postura, manteniéndose al margen, dejando al Sr. Patxi Alaña para que me contestase de forma personal, asumió por parte de su Grupo de Dirección una contestación totalmente desafortunada y fuera de contexto, en la que se incluyen errores como el afirmar que en Bizitza no hay ninguna cúpula, cuando el escrito lo firma el Grupo de Dirección, o, lo que es peor, decir que, no entendían la mención que hice a Bizitza, la cual al ser pública había dañado a la Plataforma. ¿Se me puede decir donde daño a la Plataforma?, ¿No será que Bizitza tenía un problema interno que venía de antes y, lo más fácil es culpar al de fuera?. De verdad que deseo que Bizitza se recomponga y se auto-organice con el ideario para el que fue creado, ya que creo que el papel de Bizitza durante la pandemia ha sido muy importante, pero, por favor, un poco de seriedad, y no se culpabilice al mensajero.
Es por ello, que, a mi parecer, Bizitza reaccionó a mi texto de forma errónea, probablemente condicionada por el Sr. Patxi Alaña, junto con personas que le estaban haciendo el juego con su partido político Stop, y, también, por no haber calibrado si Bizitza, de entrar en el terreno de la política, iba a defender a los partidos políticos, como lo hacían algunas personas del Grupo de Dirección, o iba a apostar por una opción como era la de Burujabetza – Democracia Directa, que defendía el empoderamiento y la soberanía de las personas organizándose con plataformas ciudadanas alejadas de la partitocracia, o bien, iba a mantenerse al margen.
Esta actuación, teniendo en cuenta que Bizitza reúne a una gran cantidad de personas que se han colocado en la disidencia, hizo que la propuesta de Burujabetza – Democracia Directa se contaminase con la propuesta del partido político Stop, junto con la actuación del Sr.Patxi Alaña, ya que el nicho de personas a las que iban dirigidas ambas propuestas se encontraba principalmente en la disidencia. Bizitza no solo no fue capaz de parar esta contaminación, sino que además, siendo una plataforma apolítica en los canales de Bizitza Información aparece la propuesta del partido político Stop, es cierto, que luego también aparece la de Burujabetza-Democracia Directa, pero al menos, de lo que yo tengo conocimento Bizitza es apolítica, luego, igual no tenía que aparecer Burujabetza, pero mucho menos Stop.
Por otra parte también hay que explicar con transparencia lo ocurrido en el grupo de Burujabetza-Democracia Directa ante esta contaminación, la cual se produjo por no haber salido desde un inicio a posicionarse claramente contra el Sr. Patxi Alaña y el partido político Stop, cayendo en la trampa del Sr. Patxi Alaña por darle un protagonismo que, en realidad no tenía, y, por no haber sido capaz de dar una pronta respuesta a esta contaminación, de manera que, desde un inicio ese espectro de personas de la disidencia, principalmente, a la que va dirigida la propuesta tuviesen bien claro que Burujabetza-Democracia Directa se coloca en el antisistema, mientras que Stop se coloca claramente en el sistema, pero eso queriendo utilizar el discurso antisistema de Burujabetza-Democracia Directa.
De esta manera se sobrevaloró a Stop para justificar los errores cometidos en Burujabetza-Democracia Directa por su inacción y falta de una respuesta contundente desde un inicio, siendo Burujabetza-Democracia Directa quien tenía que haber puesto de forma clara las reglas del juego, no habiendo visto que mi escrito servía para establecer una línea roja entre ambas propuestas, de forma que la de Burujabetza no quedase contaminada con la de Stop, y, proponiendo una ruptura con Stop, de manera que este partido político hiciese la campaña de su partido por un lado, y nosotros, la propuesta de Burujabetza por otro.
Habría que haber sido coherentes y explicar a la gente que Burujabetza no concibe crear batzarres para que al final, apuesten, teniendo derecho, por un partido político, ya que lo honesto es que si van a tomar esa decisión, sepan el ideario de ese partido político. No se pueden generar expectativas de plataformas antipartido cuando al final, aún siendo la decisión soberana, lo que se acepte es ir con el paraguas de partido, y, no porque vayan con un partido, sino porque, se explique la propuesta de Burujabetza, y no la esencia del ideario del partido.
Un partido político es una estructura piramidal con un ideario político donde el funcionamiento se realiza en base a ese ideario y es una cúpula quien establece las directrices.
Una plataforma ciudadana es un movimiento horizontal donde las decisiones las toma la propia asamblea sin que haya una dirección que imponga las decisiones, es decir, deciden ellos y son soberanos para hacerlo, siendo los respresentantes elegidos meros portavoces de esa asamblea.
Siendo promotor de la idea inicial, mi intención fue la de querer descontaminar de forma inmediata la propuesta de Burujabetza-Democracia Directa. El grupo de trabajo, en mi opinión, cayó en un miedo escénico haciéndole todavía más víctima al Sr. Patxi Alaña, sobrevalorando al partido Stop, de forma que no apoyó mi intención, por lo que yo pasé a un segundo plano, ya que no les parecía conveniente que expusiera ante la gente, no solo, en que consistía Burujabetza – Democracia Directa, sino porqué se había dejado contaminar la propuesta y como se podía haber descontaminado desde un inicio. Se me dijo que por estrategia y prudencia era mejor que no tuviese la libertad de trasmitir lo que creyese oportuno respecto a lo ocurrido, cayendo en lo que es propio de las estrategias de los partidos políticos al uso, ante los tacticismos y lo que se cree oportuno decir y no decir, todo ello mirando, por el espejo retrovisor a lo que hacía el Sr. Patxi Alaña y su partido Stop.
Aún con todo lo acontecido y habiendo pasado a la retaguardia, considero que a pesar de los errores, la única alternativa política válida, en este momento, es la de la propuesta antisistema Burujabetza – Democracia Directa. Espero que la gente entienda con este escrito lo ocurrido, así como espero que apuesten por su propia soberanía individual y colectiva, y, que por lo tanto consideren que Burujabetza- Democracia Directa no es de nadie en particular y si es de todos a nivel colectivo.
Este escrito, pretende precisamente desmarcarse de la política tradicional de la partitocracia, por ello los ejes fundamentales deben ser la transparencia, la soberanía, el respeto a los derechos humanos y la democracia. En virtud de esa transparencia creo que si lo que se pretende es que la gente ejerza su soberanía individual para luego pasar a la colectiva, es necesario trasmitir a la gente valores con total sinceridad de manera, que ésta esté informada y pueda elegir como quiere ser soberano, a diferencia de lo ocurrido con la pandemia, donde todos los partidos políticos al unísono nos la han usurpado, pudiendo citar entre otras medidas, la falta de conocimiento informado en el caso de las inoculaciones, no cumpliendo con ello, ni con la transparencia ni con la soberanía que se debe tener para que después de ese conocimiento informado la gente pudiese tomar una decisión.
Por lo tanto, animo, a pesar de los errores, a que la gente de forma totalmente libre, de su firma a las plataformas ciudadanas, con el fin de empezar a poner los cimientos de un cambio de paradigma en la política tradicional al uso, y, aprovecho a dar las gracias a tanto a aquellas personas que han firmado, como a las que han trabajado por recogerlas, y les animo a que continúen haciéndolo hasta agotar el plazo que se tiene para subsanar errores.
Bilbo a 23 de Abril de 2023
Jon Ander Etxebarria Garate
El dato mata el relato 